Stephanie Kwolek, la ingeniera química que gracias a su invento ha salvado miles de vidas alrededor del mundo

Comunicado. ● Stephanie Kwolek fue una pionera en el ámbito de los materiales poliméricos y un sector en el que predominaba el género masculino.

A lo largo de los años, las mujeres han tenido un papel fundamental en el desarrollo de los diversos ámbitos de la vida política, social y económica en el mundo.

De acuerdo con ONU Mujeres, ha habido grandes avances en la presencia de mujeres en el sector industrial y el desarrollo tecnológico; sin embargo, la brecha sigue siendo grande.

En su informe Las Mujeres en la Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas en América Latina y el Caribe de ONU Mujeres se destacó que sólo el 3 por ciento de los premios Nobel en ciencias ha sido entregado a mujeres.

En América Latina el panorama es un poco más alentador, pues se registra que el 45 por ciento de los estudiantes de ciencias, tecnologías, ingenierías y matemáticas son mujeres, pero esta cifra se reduce en tanto se eleva el grado de especialización y desarrollo en el campo profesional.

Por esta razón se conmemora el Día Internacional de la Mujer Ingeniera pues se busca fomentar el desarrollo de la mujer en los sectores de la tecnología e investigación y reconocer el trabajo que han realizado.

Esta celebración se origina con motivo del 95 aniversario de la Women´s Engineering Society en 2014, con el objetivo de destacar y reconocer a las mujeres pertenecientes al sector.

Una mujer ingeniera que dejó un gran legado

Cuando hablamos de mujeres que han dejado un gran legado a lo largo de la historia y especialmente en el campo de la investigación y la ingeniería, tenemos que recordar a Stephanie Kwolek, ingeniera química que, mientras colaboró con DuPont, logró desarrollar una fibra de arámida que ha salvado miles de vidas durante más de 50 años: el Kevlar®.

Este compuesto de alta resistencia es utilizado, principalmente, en equipos de protección personal como chalecos antibalas y cascos balísticos, pero también en diversos campos de la industria, pues su resistencia y maleabilidad permiten emplearse en campos de las telecomunicación, la construcción, la movilidad y hasta en el desarrollo de tecnología aeroespacial.

Kwolek nació el 31 de julio de 1923 en New Kensington, Pensilvania. Al concluir sus estudios comenzó a trabajar en DuPont como ingeniera química polimérica y desarrolló gran parte de su carrera en el laboratorio de fibras textiles.

Su objetivo era inventar una fibra que fuera más resistente que el nylon, sin embargo después de distintos experimentos y pruebas logró formar en 1985 el poliparafenileno tereftalamida, un componente incluso más resistente que el acero y sobre todo más ligero. La compañía comenzó a comercializar el Kevlar® en 1972, este material tiene actualmente más de 200 aplicaciones.

Esta invención trajo consigo diversos reconocimientos, entre ellos su ingreso al Salón Nacional de la Fama de Inventores en 1994.

Con el paso de los años Stephanie se convirtió en un ejemplo a seguir para las ingenieras o estudiantes del área. Durante su vida siempre buscó impulsar a las mujeres a cumplir sus metas y animarlas a especializarse bajo disciplinas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (Educación STEM), cuyas ramas anteriormente eran elegidas únicamente por hombres.

 

 

Hoy también publicamos las siguientes notas y más...

Una dieta rica en carotenos se asocia con una menorpresencia de grasa en las arterias

El sector pesquero neerlandés se contrae y esto no sóloafecta a los pescadores

 


Noticias