Comunicado. Hay una generación que necesita saber más sobre los productos que consume. La misma que se desplaza frente a anuncios de belleza con un único pensamiento en mente: muéstrame los datos. Esa generación, exigente, informada, radicalmente orientada a resultados y al beneficio, está empujando al mercado del colágeno hacia una transformación inevitable.
Esa evolución tiene un nombre: Péptidos Bioactivos de Colágeno® (BCP®). Desarrollados por la empresa alemana GELITA, estos compuestos representan una nueva forma de entender el colágeno: no como promesa estética, sino como herramienta de precisión biológica.
Formular con Péptidos Bioactivos de Colágeno implica diseñar productos que activan procesos fisiológicos específicos. A diferencia de las proteínas genéricas, estos péptidos están concebidos para hablar el lenguaje del cuerpo: estimular células de la piel, del cartílago, de los huesos o de los tendones para producir colágeno justo donde hace falta.
Por primera vez, los desarrolladores de productos funcionales tienen la posibilidad de formular con propósito: elegir el tipo de colágeno según el beneficio deseado.
¿El objetivo es mejorar la elasticidad y firmeza de la piel? VERISOL® ha demostrado en estudios clínicos un aumento significativo en la hidratación cutánea y una reducción visible de arrugas. ¿Se busca mayor movilidad en personas activas o adultas mayores? FORTIGEL® fue diseñado específicamente para apoyar la regeneración del cartílago articular. ¿Recomposición corporal? BODYBALANCE® muestra resultados positivos en el aumento de masa muscular y la reducción de grasa cuando se combina con entrenamiento físico.
“Más allá de sus diferencias, estos péptidos comparten un principio clave: actúan con especificidad funcional. Esto abre un nuevo horizonte para la innovación en suplementos, bebidas, gomitas, barras proteicas o fórmulas nutricosméticas, en un momento donde la personalización ya no es un lujo, sino una exigencia”, explica Ana de Nadai, Directora Comercial y de Mercadotecnia de GELITA México.
Los consumidores ya no aceptan soluciones universales: esperan productos que respondan a sus necesidades particulares y que lo hagan con evidencia científica.
En ese contexto, los Péptidos Bioactivos de Colágeno permiten crear fórmulas eficaces, seguras y con resultados medibles.
Además, su versatilidad permite integrarlo fácilmente en múltiples formatos: desde cápsulas, shots bebibles o sticks para mezclar, hasta panificación (pan, galletas), chocolates y bebidas listas para el consumo (carbonatadas o no). Y lo más importante: su efecto se logra con dosis de entre 2.5 y 15 gramos diarios, lo que favorece la adherencia y mejora la experiencia de consumo.
Una nueva generación de productos funcionales
Esta nueva etapa del colágeno representa, en palabras de De Nadai, “una invitación a repensar no solo qué se formula, sino por qué y para quién”. Y es ahí donde los Péptidos Bioactivos marcan una diferencia: permiten diseñar productos dirigidos a cuidar articulaciones específicas, sostener el rendimiento deportivo, suavizar los efectos del envejecimiento o reforzar la recuperación muscular.
En este escenario, el colágeno deja de ser una moda para convertirse en un ingrediente esencial en la ciencia del bienestar. Y empresas como GELITA, con su enfoque en bioactividad, evidencia y propósito, están marcando la pauta: traducir lo complejo en beneficios tangibles.