Comunicado. En México, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (AGRICULTURA) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) presentaron oficialmente los Ficheros de Prácticas Agroecológicas Resilientes (PAR) de café y miel, durante el evento “Prácticas agroecológicas y resilientes en el marco del acompañamiento técnico en las Escuelas de Campo”.
Las PAR constituyen un conjunto de técnicas locales, tradicionales y científicas que fortalecen la producción frente a los crecientes riesgos ambientales y antrópicos derivados del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y el manejo inadecuado de suelos y cultivos. Se convierten en un primer frente de adaptación, indispensable para proteger los ecosistemas y los medios de vida de las y los pequeños productores. Su importancia radica en que:
- Reducen la vulnerabilidad de los sistemas productivos.
- Incrementan la resiliencia ecológica y productiva.
- Favorecen la sostenibilidad económica y social.
- Complementan las estrategias de gestión del riesgo
Los PAR son una herramienta técnica y metodológica que sistematiza experiencias exitosas y recomendaciones adaptadas a los sistemas productivos de café y miel, resultado de la colaboración entre el acompañamiento técnico de las Escuelas de Campo de AGRICULTURA y el PNUD.
En su mensaje, Julio Berdegué, titular de AGRICULTURA, reconoció el trabajo del personal técnico y de las productoras y productores de maíz, café y miel que contribuyeron a la elaboración de los ficheros, y subrayó que la adopción de prácticas agroecológicas resilientes es clave para avanzar hacia una producción de alimentos sustentable y con mayor capacidad de respuesta frente al cambio climático.
“Contar con estas fichas, es muy importante porque si no el conocimiento, acumulado en cada una de las Escuelas de Campo y en cada una y uno de estos productores, se queda ahí y no circula y no nos permite contribuir a la soberanía alimentaria de la nación, que es el eje de la política agroalimentaria del Gobierno de México”, subrayó.
Además, expuso que esta iniciativa no sólo ayuda a producir más o de una mejor manera, sino también a una mayor estabilidad y resiliencia ante los fenómenos climáticos y, sobre todo, a garantizar un mejor bienestar a los campesinos mexicanos.
La representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en México, Silvia Morimoto, resaltó el valor de la cooperación con AGRICULTURA y las Escuelas de Campo para construir herramientas metodológicas que parten del territorio: “Con prácticas resilientes, alertas tempranas, seguros paramétricos, reducimos de manera real el riesgo para pequeñas y medianas agricultoras. Sigamos construyendo un campo más productivo, más sostenible y más resiliente, porque cuando fortalecemos a quien cultiva la tierra, fortalecemos a México”.
El representante adjunto del PNUD, Xavier Moya García, explicó que en los ficheros “estamos reconociendo también la autoría, los derechos de autor, y ese conocimiento ancestral, poniendo la comunidad y la escuela que los aportó. Eso es importantísimo”.
La directora general de Transición Agroecológica, Nayeli Martínez Hernández, subrayó la relevancia de contar con instrumentos que acerquen el enfoque agroecológico al trabajo cotidiano con las y los productores, quienes reciben acompañamiento técnico a través de las Escuelas de Campo que integran la experiencia práctica, el conocimiento local y la innovación: “Su objetivo fundamental es garantizar que las familias productoras puedan enfrentar con mejores herramientas los desafíos crecientes del cambio climático y también del mercado, sin comprometer los recursos de las generaciones futuras”.
La coordinadora general de Sustentabilidad y Resiliencia Climática, Xóchitl Ramírez Reivich, enfatizó que los ficheros PAR permiten vincular la política de resiliencia climática con acciones concretas en las unidades de producción, al ofrecer orientaciones claras y accesibles para la transición hacia modelos productivos más sostenibles. “Aquí, en estos ficheros, vienen una serie de actividades, por ejemplo, cómo no hacer la quema del rastrojo, sino meterlo e incorporarlo al suelo; cómo podemos empezar a sustituir los insumos químicos por bioinsumos, un reto que tenemos todavía muy importante; además de poder ver cómo el agua y el suelo son recursos que se agotan, que no son recursos ilimitados”.
La coordinadora de Políticas Públicas para la Prevención de Desastres de CENAPRED, Constanza Rivera Pereira, expuso la importancia de estas prácticas en la reducción de riesgos asociados a fenómenos climáticos y eventos extremos en el medio rural, en el marco de la Estrategia Nacional de Reducción de Riesgos: “La verdadera recuperación ocurre cuando, además de lo anterior, se pueden recuperar los medios de vida. Se puede volver a producir, comercializar, alimentarse y sostenerse con dignidad”.
En representación de las Escuelas de Campo, el técnico de miel Isaac Ismael Cauich, compartió la experiencia de trabajo con apicultoras y apicultores en territorio y la manera en que las PAR se integran en el manejo cotidiano de los apiarios. “Es importante tener este documento porque no solamente se plasman letras, sino también imágenes y diferentes textos que nos ayudan, a nosotros, a poder facilitar la práctica, a hacer el cambio verdadero, porque si nosotros no nos ponemos la camiseta, pues no estamos avanzando. Yo creo que realmente esto es el cambio que necesitamos, este es el cambio que queremos en las Escuelas de Campo”.
Por su parte, el técnico agroecológico del sistema café Juan Carlos García, expuso cómo estos ficheros recogen prácticas locales y conocimientos técnicos que ayudan a las y los caficultores a enfrentar plagas, enfermedades y variaciones climáticas sin comprometer la salud del suelo ni la calidad del grano. “Ya hemos demostrado con hechos y con resultados cómo hemos incrementado la producción y cómo hemos mejorado la calidad de los productos desde 2019”.
Hoy también publicamos las siguientes notas y más...
Accionistas de Herdez aceptan la venta de 25% de McCormick
Anuncian brote de influenza aviar en aves domésticas en Colombia
